NEW PLAY CONTROL! Pikmin

La odisea de Olimar

Olimar, navegante espacial conocido allende la más lejana de las constelaciones por su tesón en el trabajo, repartía mercancías de planeta en planeta un día sí y otro también, digno de la confianza ajena por su impecable cumplimiento de los plazos.

Pero en un aciago día su nave, de nombre Dolphin, colisionó contra un inoportuno asteroide y entró en barrena. Sin embargo, antes de quedar totalmente inutilizada, el Dolphin fue capaz de realizar una última entrega: el propio Olimar. ¿El lugar? Un extraño planeta.

Cuando se despertó, Olimar tan solo pudo contemplar los restos de su milagrosa nave, una mera sombra del pasado. La buena noticia, pensó, es que al menos había vivido para contarlo. Por el equipo de supervivencia integrado en su traje se enteró de la mala: el aire del planeta era venenoso, con lo que solo disponía de energía para 30 días.

Olimar se aprestó a buscar auxilio, y no tardó en darse cuenta de que no estaba solo. El primer día descubrió un híbrido de planta y animal al que llamó Pikmin, unas criaturas que podía controlar a su antojo, ya que le obedecían ciegamente. Cuando el comandante y su séquito se pusieron a explorar la zona, encontraron una pieza del Dolphin; ahora debían afanarse en rescatar las demás piezas repartidas por todo el planeta.

La tarea es titánica: recuperar en 30 días otras tantas piezas de la nave, repartidas a lo largo y ancho de un planeta (lleno de animales predadores de Pikmin) que se vuelve más peligroso cada día. ¿Conseguirá encontrar las partes para reconstruir el Dolphin?

Es hora de ponerse manos a la obra.

Conoce a los Pikmin

Al poco de caminar por el planeta, Olimar se topó con un extraño bulbo, parecido a una cebolla de Hocotate. Esta "cebolla" escupió una semilla que germinó y adquirió un tono rojo. Olimar la arrancó del suelo, y así descubrió a estas criaturas llamadas "Pikmin".

Los Pikmin ejercen todo tipo de funciones para Olimar: expertos en demoliciones, peones, guerreros... Le obedecen ciegamente y hasta dejan que los lance por los aires. Para producir más Pikmin hay que nutrir la cebolla a base de bestias y píldoras. Existen tres tipos de Pikmin en el planeta, todos ellos leales al capitán.

Pikmin rojo

Representan la fuerza bruta del grupo. Su ataque inflige más daño que ningún otro a los animales del planeta y son inmunes al fuego. Sin embargo, mejor será que los mantengas alejados del agua, porque no saben nadar.

Pikmin amarillo

Son los más temerarios. Estos Pikmin de altos vuelos son los más ligeros del grupo y les encanta dejarse llevar por el viento al ser lanzados, con lo que llegan a alcanzar alturas de vértigo. Son los únicos capaces de manejar las peligrosas rocas bomba originarias de este planeta.

Pikmin azul

A estos Pikmin nada les gustaría más que pasar todo el día nadando a su bola en las charcas del planeta. Su especie de branquias les permite respirar bajo el agua y hace de ellos un miembro indispensable en el equipo de Olimar.

De semilla a flor

Cuanto más tiempo permanezca en tierra un Pikmin, más madurará, hasta que su hoja se convierta en un capullo y finalmente en una flor. Los Pikmin en flor son los más rápidos y fuertes, mientras que los aún florecientes están en pleno desarrollo. Si beben néctar, florecerán al instante.

Las bestias

Lo único que se interpone entre Olimar y las piezas de su nave es, por así decirlo, todo: y las bestias del planeta no son menos. El intrépido capitán no despierta su apetito, pero sus subordinados sí. Tampoco es que quieran comer Pikmin hasta provocar su extinción, simplemente están tan deliciosos que no se pueden resistir.

Bulbos

¿Puede ser peligroso un bichejo con lunares? Pues si se trata de un bulbo hambriento, vaya que sí. Su apetito es tan desmesurado como sus ojos, que no le permiten enterarse de lo que sucede a sus espaldas. Atacarlo por detrás es la mejor manera de hacer blanco.

Verraco Dragón

Ciertos brotes se emplean para apagar fuegos, y el Verraco Dragón se encarga de prenderlos. Esta bestia rebosante de amor transmite la llama de su pasión... a los apasionados del fuego. Puede zafarse de los Pikmin que lo monten y rociarlos con un buen fogonazo. Su pariente lejano escupe un chorro de aire.

Sapo Gigante

Estas fornidas criaturas con pinta de sapo saltan y se precipitan hacia el suelo para aplastar cualquier cosa. A menudo son capaces de saltar con Pikmin aún pegados. Hace falta una buena panda de Pikmin para hacerlos permanecer bien pegaditos a la tierra.

Moscardón quinqui

Esta peste voladora dotada de dos brazos persigue a tu pandilla, se lanza en picado para agarrar a algún Pikmin incauto y lo vuelve a plantar. A este bicho hay que despacharlo de inmediato: desequilíbralo y rodéalo hasta que estire la pata.

Lucha por la supervivencia

A algunos 30 días les parecerán una eternidad, pero para Olimar el último de ellos podría darle el pasaporte para la eternidad. Con todo, transportar mercancía es su especialidad y, con los intrépidos Pikmin a su lado, sacará el máximo partido a los secretos del planeta para aprovechar cada segundo, y asegurarse de que no sea el último de su vida.

Segando que es gerundio

Al principio, Olimar ve entrañable la forma en la que los Pikmin se quedan rezagados cual cachorro perdido... hasta que se pierden de veras y acaban en las fauces de un bulbo enorme. Conseguir que florezcan es su única forma de mantenerse junto a Olimar y proporcionarle la velocidad que necesita. Cuando Olimar no pueda permitirse dejarlos plantados en la tierra, puede llevarlos de paseo por la hierba, en donde a veces se encuentra el jugoso néctar. Un trago hará florecer ipso facto a estos lentorros.

Rocas bomba

Las rocas bomba son esenciales para derribar puertas de piedra y pueden infligir mucho daño a las bestias, pero también pueden herir a Olimar o a cualquier Pikmin que no se resguarde al producirse una explosión. Olimar puede ordenar a los Pikmin que se separen en grupos cuando necesita que uno de ellos lance una bomba. Así, los Pikmin amarillos con bombas se separan de sus homólogos sin ellas. Una vez separados, debe ordenar a esos pocos Pikmin amarillos que se reúnan con él, lanzarlos para que coloquen las bombas y llamarlos de vuelta para que mantenerlos a salvo. Esta forma disminuye al menos el daño que puedan recibir otros Pikmin debido a las explosiones.

Reparto de tareas

Olimar puede acompañarse de hasta 100 Pikmin, y por su propio bien le conviene mantenerlos ocupados trabajando. También es consciente de sus puntos fuertes y débiles, de ahí que el reparto de tareas adquiera todavía más importancia. Por ejemplo, por cada 100 que tenga, 30 pueden ocuparse de la construcción de un puente, 30 se encargan de derribar un muro y el resto de mantener la zona libre de bestias o trabajar para producir más Pikmin. Cuantos más Pikmin trabajen en un proyecto, más rápido se llevará a cabo. Sin embargo, a medida que avanza la partida necesitarás cada vez más reservas de Pikmin por si se produce cualquier tragedia al enfrentarte a las bestias de mayor enjundia.

Practica con el modo Desafío

Una vez descubiertos los tres colores, Olimar puede probar su destreza como criador de Pikmin en el modo Desafío. En esta modalidad independiente deberá producir el mayor número posible de Pikmin en un solo día. Todos los escenarios están plagados de bestias; se impone una técnica de combate excepcional para que la tasa de mortalidad no supere a la de natalidad.

NOVEDADES

La serie NEW PLAY CONTROL! de Nintendo rescata clásicos de Nintendo GameCube actualizados para su uso en Wii. Te esperan nuevas funciones, experiencias y, lo que es más importante, un flamante sistema de control, ya juegues por primera vez o hayas disfrutado de las versiones originales.

En este NEW PLAY CONTROL! Pikmin, el cambio más sustancial por lo que concierne al sistema de control radica en el acto de apuntar. En el juego original, el blanco se movía al compás de Olimar, lo cual hacía harto difícil apuntar cuando la situación era apremiante. Pero en este NEW PLAY CONTROL! Pikmin, no tienes más que apuntar con el mando de Wii. Las propiedades del puntero integrado no solo facilitan el movimiento del cursor, sino que brinda a los jugadores una precisión nunca vista. El Nunchuk también se utiliza para este juego: su palanca de control determina los movimientos de Olimar, mientras que la mayoría de acciones de los Pikmin se realizan mediante el mando de Wii.

Dar órdenes a los Pikmin

Si no tomas medidas para controlarlos, los Pikmin empezarán a holgazanear, se desconcentrarán y, lo que es peor, dejarán de trabajar. Para atraer su atención y conseguir que le sigan, Olimar usa su silbato, que se activa pulsando el Botón B del mando de Wii. El alcance del sonido se refleja en forma de un pequeño círculo, y los Pikmin que se encuentren en su interior formarán tras Olimar. Cuanto más tiempo mantengas apretado el Botón B, más grande se hará el círculo, cuyo centro se fija apuntando el mando de Wii hacia la pantalla y moviendo el cursor.

Lanzar Pikmin

El lanzamiento de Pikmin suele ser el primer recurso de Olimar para atacar a las bestias del planeta. Para hacerlo, mueve el cursor con el puntero del mando de Wii. Una vez fijado el objetivo, pulsa el Botón A para lanzar al Pikmin de turno. Si Olimar está acompañado de muchos Pikmin, pulsa A repetidamente para lanzar uno tras otro.

Cambiar de Pikmin

En la esquina inferior izquierda de la pantalla advertirás la presencia de un icono que muestra cuántos Pikmin estás a punto de coger y lanzar. Si quieres lanzar un Pikmin de diferente color, puedes cambiar entre ellos (una función no disponible en el juego original). En vez de soltar el Botón A para lanzar, mantenlo presionado y después pulsa el Botón B para cambiar a un Pikmin de color diferente (pulsa dicho botón si quieres volver a cambiar de color). A continuación suelta el Botón A para lanzar a esa criaturilla por los aires. ¡Aterriza como puedas!

Agrupar Pikmin

Es posible que un solo Pikmin no resulte muy intimidador, pero un centenar de ellos puede acongojar hasta a la mayor de las bestias. En vez de tirarlos uno por uno, Olimar puede ordenarles a todos que se dirijan a una misma dirección. Apunta con el mando de Wii al lugar en donde quieres que se reúnan y a continuación mantén pulsada hacia abajo la cruz de control. (Esta acción se ejecutaba moviendo el Stick C del mando de Nintendo GameCube en una determinada dirección). Al encontrar una pieza de la nave, Olimar tendrá que ordenarles rodear el objeto y llevarlo de vuelta al Dolphin. La agrupación también se emplea para alejar a un conjunto de Pikmin de posibles peligros, como el agua o el fuego.

¡A formar!

A menudo Olimar querrá ser seguido por un solo tipo de Pikmin, manteniendo a un grupo de otro color cerca de él para tenerlos a mano. En cualquier momento puede mandar a un grupo ponerse firmes. Para ello basta con pulsar el Botón C del Nunchuk. Una vez que los Pikmin estén en su grupo correspondiente, apunta con el mando de Wii a un grupo determinado y pulsa el Botón B para usar el silbato de Olimar y hacer que lo sigan.

Viaje en el tiempo

Amén de las mejoras en el sistema de control, ahora se puede utilizar un archivo de guardado para "desandar el camino". En el Pikmin de Nintendo GameCube solo se podía volver al día anterior si uno no estaba satisfecho con sus progresos. Por el contrario, en el NEW PLAY CONTROL! Pikmin es posible volver aún más atrás en el tiempo. Si te encuentras en el día 10 y te das cuenta de que has cometido un error en el día 8, puedes regresar a ese día y reanudar la aventura.