Los fantasmas son espíritus que habitan en la oscuridad y que se lo pasan bomba asustando a los humanos. Algunos de estos espectros parecen haberse encariñado conmigo. Al observarlos detenidamente, he notado que desprenden una misteriosa energía en formato líquido y he podido recoger varias muestras. ¡Estoy seguro de que esa misteriosa sustancia es la clave para desarrollar infinidad de nuevos inventos!
Ninguno de los experimentos efectuados hasta la fecha ha revelado dato alguno sobre esta peculiar energía espectral. Permanece inalterable ante fuentes de calor o frío y no reacciona ante estímulos externos como hierro, goma o incluso las rosquillas del desayuno.
Cuando parecía que me encontraba en un punto muerto, ¡hice un descubrimiento sorprendente! Estaba degustando mi excelso paladar científico con una exquisita taza de café de Verdestro recogido directamente del Valle Sombrío cuando, de repente, uno de esos pícaros fantasmas se me apareció por detrás. Pegué un brinco tan grande que derramé todo el café sobre un matraz que contenía energía espectral... ¡y se produjo una reacción espontánea!
La energía espectral comenzó a adoptar la misma tonalidad verdosa que el refinado café que había preparado. Al poco, también había ganado en viscosidad... ¡y ahora parece haberse estabilizado como un elemento totalmente nuevo!
He decidido darle el nombre de "gominol" a este nuevo elemento. Pero no tengo tiempo que perder: ¡debo retomar mis investigaciones de inmediato!
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